Este miércoles, el Gobierno mexicano informó del hallazgo de los primeros restos humanos en la mina Pasta de Conchos, ubicada en Coahuila, tras casi dos décadas del trágico colapso que cobró la vida de 65 trabajadores. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) anunció en un comunicado que el descubrimiento se produjo después de cuatro años de intensos trabajos de rescate, iniciados por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Según el comunicado oficial, los restos humanos fueron encontrados en una zona de la mina donde trabajaban los mineros el día del accidente. Además de los restos, se recuperaron diversos objetos de trabajo, aunque no se identificó evidencia de una explosión en ese punto, contradictorio con las versiones iniciales de las autoridades sobre las causas del colapso.
El proceso ahora pasa a la etapa de identificación forense a cargo de la Fiscalía General del Estado de Coahuila, la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) y el Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen). Estas entidades llevarán a cabo peritajes para determinar las causas del accidente que dejó un legado de dolor y reclamo de justicia por parte de los familiares de las víctimas.